Seamos fieles en las cosas pequeñas, porque ahí estará nuestra fortaleza.
Miremos el ejemplo de la lámpara que arde con el aporte de pequeñas gotitas de
aceite, y sin embargo da mucha luz.
Las gotitas de aceite de nuestras lámparas son las cosas pequeñas que realizamos
diariamente: la fidelidad, la puntualidad, las palabras bondadosas, las
sonrisas, nuestra actitud amorosa hacia los demás.
No hay nada que sea pequeño a los ojos de Dios, y Él mismo se tomó la molestia
de hacerlas para enseñarnos cómo actuar. Por eso se transformaron en infinitas.
Las tentaciones las tenemos todos. Pero si Jesús es una realidad viviente en mi
vida, entonces ya no tengo miedo.
Somos pequeños instrumentos, pero muchos pequeños instrumentos en las manos de
Dios pueden hacer milagros.
Yo soy el lápiz de Dios. Un trozo de lápiz con el cual Él escribe aquello que
quiere.
Empieza transformando todo lo que haces en algo bello para Dios.
Mensaje:
sabes, La verdadera felicidad consiste simplemente en, hacer el bien
Biblia:
la Biblia dice: "Hagan lo que hagan, trabajen de buena
gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que
el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor."
Fin.
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